Meditación de la Semana
Santísima Trinidad
Señor Jesús, que tu gracia nos transforme
en dedicados cultivadores
de las semillas del Evangelio
que fermenten la humanidad y el cosmos,
en espera confiada
de los cielos nuevos y de la tierra nueva,
cuando, vencidas las fuerzas del mal,
se manifestará para siempre tu gloria.
Que la gracia del jubileo
reavive en nosotros, Peregrinos de Esperanza,
el anhelo de los bienes celestiales
y derrame en el mundo entero
la alegría y la paz de nuestro Redentor.
A ti, Dios bendito eternamente,
sea la alabanza y la gloria por los siglos