Porque tuya es la victoria,
porque tuyo es el poder,
porque tuya es la fuerza,
mi Dios, te bendeciré.
Porque tuya es la gloria,
porque tuyo es el honor,
tú mereces alabanzas,
yo te alabo, mi Señor.
GLORIA, HONRA Y ALABANZAS
SOBRE EL TRONO DE MI DIOS,
DONDE SE SIENTA EL CORDERO,
QUE NOS TRAE LA SALVACIÓN.
GLORIA, HONRA Y ALABANZAS
CANTAREMOS EN TU HONOR;
VEN Y HABITA ENTRE TU PUEBLO,
Y BENDÍCENOS, SEÑOR.
VEN Y HABITA ENTRE TU PUEBLO…
Y BENDÍCENOS, SEÑOR.